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Sumérjase en la historia y la cultura de Kazajistán en el Museo Estatal Central. Esta atracción cultural cuenta la historia del país desde tiempos prehistóricos hasta el periodo mongol, incluyendo además el periodo de la ocupación soviética. El museo está situado en la plaza central, frente a los edificios de la administración política.

No olvide visitar la colorida catedral de Zenkov (Ascensión). Este impresionante edificio está construido totalmente en madera sin clavos que sostengan la estructura. Si esto no le impresiona lo suficiente, este fue uno de los pocos edificios de la ciudad que se conservó intacto después del terremoto que sacudió la ciudad en 1911. La catedral es una espectacular vista especialmente en invierno, espolvoreada de nieve.

El Museo de Arte Kazajo (también denominado Museo Estatal A. Kasteyev) alberga una de las mejores colecciones del país de arte ruso y de Europa occidental.

Para relajarse a lo grande, visite el complejo termal de Arasán, al oeste del parque Panfilov. Los baños funcionan desde 1981 y, bajo las cúpulas de azulejos, podrá disfrutar de una sauna finlandesa, hammams marroquís, banyas rusos y baños de vapor turcos. Lo mejor es reservar un par de horas para aprovechar los baños al máximo o un poco más de tiempo si desea acompañarlo de un masaje.

Si desea conocer los alrededores, diríjase al lago Big Almatý en las montañas Tien Shan, un sitio que frecuenta la población local. No está permitido nadar pero ¿por qué no llevarse una canasta de picnic y escoger un sitio entre las rocas junto al lago?

Otra atracción cerca del lago es el magnífico parque nacional Ile-Alatau. Este sorprendente lugar abarca 2000 kilómetros cuadrados con densos bosques de pícea, praderas y las montañas Zailiysky Alatau.

En el corazón de la ciudad, Afisha es un restaurante concurrido con vistas al Stalinist State Opera House. Pruebe el risotto con setas y disfrutará de una gran velada. El restaurante Vista del hotel Ritz Carlton, uno de los edificios más altos de la ciudad, también ofrece hermosas vistas de la ciudad con las montañas como telón de fondo. Disfrute en el almuerzo de las especialidades de kebab local antes de degustar la exquisita pastelería.

Si lo que busca es una experiencia gourmet de calidad, diríjase al restaurante Seven. Allí disfrutará de una velada con entremeses experimentales, platos kazajos con un toque de lujo y de la música de fondo de piano y violín. El menú incluye un buen vino kazajo, «ak bastau», que proviene del valle Assa cerca de la ciudad.

En el otro extremo, Kaganat es un rincón local donde podrá comer por poco más de 1 $. Este restaurante estilo cantina sirve platos kazajos tradicionales día y noche, desde «lagman» (pasta) hasta «manti» (bollos de masa). Por este precio, merece la pena probarlos.

Las compras en Almatý principalmente se centran en los bulliciosos mercados al aire libre. La ciudad cuenta con numerosos bazares donde podrá comprar fruta fresca, verdura, alfombras hechas a mano y artesanías locales. El Green Bazaar es uno de los más populares y está ubicado en la Ruta de la seda que se utilizó durante cientos de años como ruta comercial entre Europa y Asia. Siempre esta muy transitado, tanto por lugareños como turistas y merece la pena la visita para experimentar su atmósfera.

Almatý también tiene destinos de compras más elegantes. El Dostyk Plaza es un concurrido centro comercial con numerosas tiendas de marca y zonas de ocio. El patio de comidas en la planta baja es un sitio especialmente glamuroso.